Del aforismo y el pensamiento estroboscópico

 



"Se denomina estroboscópico al efecto óptico que se produce al iluminar mediante destellos, un objeto que se mueve en forma rápida y periódica". 

Las epifanías de la comprensión proyectan voluntariamente luz cenital sobre un mundo fugaz por mor del tiempo sucesivo que sojuzga, implacable/mente, la conciencia discursiva.

"Cuando un objeto no puede ser visto si no es con esta iluminación destellante, cuando la frecuencia de los destellos se aproxima a la frecuencia de paso del objeto ante el observador, este lo verá moverse lentamente, adelante o atrás según si la frecuencia de los destellos sea, respectivamente, inferior o superior a la de paso del objeto". 

El aforismo consigue detener la imagen de la realidad para plasmarla como si no estuviera transcurriendo, sin traicionar, empero, su esencial transitoriedad.

"En este fenómeno están basados los estroboscopios, empleados para examinar con detalle y sin contacto físico el comportamiento de partes mecánicas en movimiento". 

El aforismo es el estroboscopio de la literatura.

"Los destellos de iluminación normalmente son producidos mediante una lámpara de descarga gaseosa como, por ejemplo, una lámpara fluorescente, aunque generalmente se emplean lámparas de flash por su mayor intensidad luminosa".

El aforista es el fotógrafo del pensamiento, que es la película de la realidad, que es la sombra del cosmos.

 

COROLARIO.- Si quiero ser tan rápido como el viento, debo pensar tan ligero como la hoja.

 

[Textos: Wikipedia / José Luis Trullo. Imagen: Alberto Buzón]

 




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